Thursday, August 14, 2008

Retorno

No daré razones ni antecedentes del viaje. Comenzaré con un largo boulevard con camellón central, líneas ferroviarias paralelas, largas luminarias que emiten una luz que se pierde en medio de la bruma, el calor y la humedad haciendo sudar todo. Son las doce de la noche. Tuxtepec Oaxaca.
Mi padre tiene en mente la carretera a Palomares. El la corrió nueva: larga y solitaria. A ambos lados del camino crecían zacatales. Las vacas se tendían en el asfalto y a partir de las dos de la mañana era probable ser asaltado.
La memoria es difícil. Pasamos junto a un cañal ardiendo. La zafra. Mi madre recuerda uno igual veinticinco años antes. Yo veo un puente, “Puerta del Papaloapan” . Lo recuerdo, pero la primera vez que lo vi, no sabía leer.Mi padre quiere aprovechar la noche. De día el sol calentará el pavimento y será insoportable. Ya hay cercas. Poblado tras poblado: Maria Lombardo, Miguel Hidalgo, Augusto Gómez Villanueva. Hay topes y gasolinerías. Me llega el recuerdo de búsquedas nocturnas entre sueño y sueño. No debía dormirme: tenía que ver si cruzaba algún animal. La noche continúa su juego de sorpresas: un oso hormiguero cruza y, sin querer, me regresa a ese tiempo

2 comments:

Olá sou Adrielle, mãe, mineira, casada e apaixonada pela vida. said...

Adorei, achei muito interessante!
Visite meu blog.

www.vivendoaoextremo.blogspot.com

Beijos e abraços!

ego met said...

Marco, hasta apenas hoy tuve oportunidad de entrar a tu blog. El mío es este, pero es meramente un ejercicio modesto de escritura. Saludos desde SLP y Gto. David O.